Que el personal de tu restaurante acuda con entusiasmo a su puesto de trabajo depende en gran medida de la motivación que reciba por parte de ti como gerente o dueño de negocio. Ya que, si bien existen reglas que fomentan e impulsan el buen desempeño, también es importante contemplar aquellos aspectos que mantienen a un empleado proactivo y optimista.
Si actualmente buscas aumentar las ganancias y reducir la rotación de personal en tu restaurante, en este artículo te compartimos las cinco claves más importantes para motivar de manera efectiva a tu personal.
Tipos de incentivos
La motivación en los equipos de trabajo se puede reforzar por medio de dos tipos de incentivos, los tangibles y los intangibles. Ambos buscan mantener la motivación y reforzar el sentido de pertenencia que siente un empleado en relación a su lugar de trabajo.
Incentivos intangibles
Estos regularmente solo requieren que, como jefe o dueño, te tomes el tiempo de ponerlos en práctica.
Incentivos tangibles
Adicional a un sueldo, este tipo de incentivos suelen incluir los ya tan conocidos vales de despensa, bonos de productividad, entre otros.
3 ejemplos de incentivos intangibles
Si ya cuentas con un equipo consolidado es momento de enfocar tus esfuerzos en retenerlos. Para lograrlo será importante que incluyas incentivos intangibles en tu liderazgo. Los siguientes tres ejemplos te servirán como punto de partida de aquellas acciones que puedes instaurar en tu propio negocio.
1. Otorga reconocimiento
Reconocer no deja de lado una llamada de atención cuando es necesario, pero sí incrementa el sentido de compromiso. Un reconocimiento a tiempo de manera grupal puede incluso servir de motor para que otros miembros busquen mejorar su desempeño. Un aspecto que puede impactar directamente tanto la calidad como las ganancias de tu restaurante.
2. Brinda oportunidades de crecimiento
Para muchos el poder crecer en su área de trabajo es un incentivo diario, pero para ello tu restaurante debe brindar este tipo de oportunidades. Date el tiempo de elaborar un plan de desarrollo para cada miembro de tu equipo. Esto les permitirá tener objetivos claros. Además de la certidumbre de que pueden llegar a adquirir nuevas habilidades y, por ende, responsabilidades.
3. Fomenta la confianza y el respeto
Para que exista una buena armonía en un espacio de trabajo es fundamental que exista el respeto y la confianza. Dicho respeto deberá comenzar por ti, para que sirva de ejemplo y logre propagarse entre todos. Asimismo, deberás promover la comunicación abierta y transparente con el objetivo de mejorar y crecer como equipo y como negocio.
5 claves para motivar diariamente a tu equipo
Adicional a los ejemplos anteriores, las siguientes cinco claves te ayudarán a cuidar que la cultura de tu restaurante se caracterice por una gestión exitosa basada en la motivación.
Recuerda la capacitación continua
Las oportunidades de crecimiento no dependen únicamente de un plan de desarrollo, sino de permitirle a tu equipo el acceso a cursos o conferencias a través de las cuales aprendan nuevas técnicas o tendencias que impacten positivamente a tu restaurante.
Establece horarios flexibles
Tal como lo hemos mencionado en otras publicaciones, el ofrecer flexibilidad en los horarios fomenta la comodidad y el respeto por el tiempo de descanso. Algo que sin duda motiva a querer dar lo mejor en el próximo turno.
Confía en tu equipo
Cada uno de los miembros de tu equipo posee habilidades y fortalezas que puede explotar y poner en práctica. Otórgales esa libertad desde su independencia para que vivan en plenitud su trabajo en lugar de sentir que pueden fallar.
Propón actividades fuera del trabajo
Más allá de celebrar un cumpleaños, ¿por qué no proponer una parrillada familiar? El mostrar interés por tu equipo y su familia podría aumentar no solo su nivel de compromiso, sino su grado de motivación. Recuerda que el lado emocional también es importante para animar y estimular a un equipo.
Implementa un sistema de bonificaciones y penalidades
Si notas que nada de lo anterior funciona en tu restaurante, puedes recurrir a un sistema de bonificaciones y penalidades. Esto le otorgará un sentido de justicia a tu equipo, además de motivarlos a siempre dar lo mejor de sí mismos.
Y, por último, recuerda que contar con un equipo propositivo te puede servir de indicador para identificar qué tan motivados están todos en sus puestos de trabajo.
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